Subir a una bici, independientemente de los motivos que te lleven a hacerlo, trae siempre efectos positivos para el cuerpo y para el alma. Por eso, la bicicleta perfecta será aquella que se ajusta completamente a ti y a las experiencias que estés dispuesto a vivir.
En Europa comienza a verse con más fuerza la modalidad originaria de los Estados Unidos que surgió en respuesta al excesivo tráfico y el comportamiento temerario de los conductores en la ciudad. El ‘Gravel’, o grava como se le conoce en español, permite experimentar al máximo de un ciclismo sin restricciones, gozando de los frutos de la montura de la bicicleta y que pone de moda el carril de tierra, el 'esterrato' en la jerga.
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Si eres de aquellos que disfruta el hacer ejercicio, pasear, el aire libre y la carretera, pero también te encanta la aventura, la adrenalina, la naturaleza y las montañas, eres un fuerte candidato para el ‘Gravel’, una de las mejores alternativas deportivas de la actualidad, que combina el ciclismo en el asfalto y la tierra.
Es muy similar, pero no se trata de MTB. Aunque el ‘gravel’ se practique en caminos de tierra la dificultad es más baja, la modalidad es más accesible y los caminos suelen ser más anchos.
En España ya se pueden ver algunas fechas destinadas a esta actividad, por ejemplo el 'Gravel Day' organizado en tres ocasiones por Sportful en la localidad gerundense de Rose.
También en La Vuelta a España, en su 74ª edición, entre el 24 de agosto al 15 de septiembre 2019, veremos trechos de montaña, lo que se ha convertido en una de sus señas de identidad. Las pruebas en grava no se extenderán por más de 200 kms, se esperan 8 llegadas en alto, cinco de ellas inédita en la ronda española.
Este año, para el 16 de Septiembre, tendrá lugar la Catalunya Gravel Tour by Ridley, en los Caldes d Monbui, una competencia destinada a promover la práctica del cicloturismo sobre Serán 85 kilómetros inicialmente cuesta arriba, entre Caldes y el Puig de la Creu para luego bajar y terminar en la salida.
El ‘gravel’ va enfocado al turismo y al disfrute de la naturaleza que a la competencia, por tanto la bici no luce agresiva visualmente, las pipas son altas, como el de las bicicletas de carretera con la intención de mantener cómodo al pedalista con el paso de las horas.
Para desarrollar de manera óptima esta actividad necesitas de una bici con ciertas particularidades, que garantice una conducción veloz y precisa, tanto dentro como fuera del pavimento. Algunos dirán que se trata de una bicicleta de carreteras con ruedas gordas, pero no es tan simple, sus neumáticos son más grandes por la grava y para mayor comodidad y su taco está menos marcados con la intención de mayor duración.
En cuanto al diseño estético, los cuadros, acabados y toda la estructura están pensados para resistir las condiciones de la actividad. Presentan coronas y la posibilidad o no de montar monoplato. Para concluir el "sloping" o inclinación del tubo horizontal es curvo que ayuda absorber la vibración.
Kiko García, ex ciclista profesional y uno de los directores técnico de la Vuelta a España, la bici para el ‘gravel’ tiene mucho futuro, la geografía nacional le brinda un potencial enorme de uso. Tenemos zonas donde hay ciento de kilómetros de pistas abiertas y forestales donde pasear y disfrutar: En la Meseta, la Rioja, la Comunidad Valenciana, Cuenca, Teruel... "Tenemos la suerte de vivir en un país que nos da mucho juego con este tipo de bicis."
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